Todo comenzó con una brillante idea de los estudiantes. En otoño, el director de Vargas, Armstrong, y la subdirectora, Matsuyama, recibieron una carta de los alumnos de tercer grado de la Sra. Alvarado. Sus ventanas dan a un gran cobertizo y pensaron: «¿No sería bonito decorar el cobertizo para tener una bonita obra de arte que mirar?». ¡Usaron sus voces, sus habilidades para escribir cartas y pusieron su «brillante idea” en acción! Con la aprobación de la oficina del Distrito, la visión artística de la Sra. Rebecca, la flexibilidad de todos nuestros maestros, el entusiasmo de nuestros estudiantes y el personal de apoyo, ¡creamos una obra maestra! Sólo hizo falta un día de rotación de todas las clases, y pudimos pintar un hermoso arco iris de huellas de manos para que todos lo admiraran. Esta fue una valiosa lección sobre el uso de su voz, el poder de poner una idea en acción, y recibir el apoyo de los estudiantes. Era importante para nosotros llevarlo a cabo, ¡y estamos muy orgullosos de nuestros estudiantes!
Artículo presentado por la subdirectora Vivian Matsuyama
